4/9/13

A cerca del mal gusto

La ingratitud en todos los sentidos. Casi tanto como usar  tanga roja con pantalón blanco, contar chistes rojos en un funeral,  la "coca de naranja" y usar animal print en todas las prendas al mismo tiempo. O los leggin estampados.
Maltratar a un anciano o a niños, subir los pies a cama extraña con todo y zapatos, decir "aliviar" cuando una mujer está embarazada, hablar de funciones intestinales frente a un infante . Y esto último es por que los padres batallan por evitar que aprendan ciertas palabras y nosotros como adultos responsables las decimos sin el menor cuidado.
Exigir descuentos cuando no dice que la tienda aplica esto a su producto, o en un restaurante trata de cambiar el platillo como las porciones o la combinación. Yo tuve una amiga así y juro que quería desaparecer bajo la carta.
"Gorrear" cigarros.  Subir a Facebook miles de imágenes de desmotivaciones con fondos negros y frases cursis. Etiquetar amigos en fotos de carros. El mal aliento, las quejas de la vida y hablar mal de todos y cada uno de los conocidos. 

Pero nada -nada- como las muestras de exhibicionismo, como poner música con volumen alto en el transporte público, la ropa que no deja a la imaginación, etc. Me resulta desagradable por el solo hecho de la desconsideración a los demás. Mi derecho a no verlos es revocado.



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