Entre Espejos

Girar la vista equivale a mirar en todos los ángulos miles de caras similares, de gestos y Alejandras exactamente iguales.
Al frente miles de ojos consternados nos miramos y parpadeamos, mientras mis reflejos y yo observamos las miles de repeticiones inmediatas de los mismos pensamientos.
De espaldas nos ignoramos. Nadie de las imágenes desean saber a quién reflejan en el frente solo nos damos la espalda entre todas.
Hacia arriba no existe la gravedad, yo estoy pegada la maldito piso y ellas al maldito cielo de asbesto, me miran llenas de odio porque, al menos a mí, no me duele la cabeza por estar pegada al cielo; yo las miro con desprecio, ellas estan juntas y yo estoy sola.
A mis pies estamos unidas otras cuantas Alejandras, ellas viven debajo de mí. Yo las piso y las hago bailar, las maltrato por que son las únicas que me miran cuando yo estoy distraída.
De izquierda a derecha me observan serviles, todas me miran cuando las miro, pero nadie me asegura que cuando mire a otro lado ellas no se mirarán a sí mismas.

Vivo con mis acciones repetidas en simulacro interminable. Entrevidas, entrereflejos. Entrespejos