En el viaje a Monterrey fuimos a una exposición fotográfica de diversos temas como la migración, la devastación y los ausentes, sin embargo las que llamaron mi atención fueron una serie de fotos tomadas a cosas -sí, cosas- encontradas en fuentes del parque fundidora. Dentro de la colección había monedas, cintas de zapato, muñecas y otros objetos que podrían considerarse basura, pero que vistos desde la lente de una cámara profesional y expuestos en una galería podrían dejarían de serlo. No por que el lugar designe la posición, sino por la fascinación que me causó ver cada una y tratar de comprender al autor y su entorno.
El arte se parece a la compleja necesidad de explicarnos y entender a los demás a través del absurdo y la frustración de nuestra realidad.
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