La Luz se fue del mundo a brillar al cielo, como debe ser.
La muerte conlleva dolor y liberación, tanto del cuerpo enfermo como las personas que estamos cerca del evento. Duele la separación, la nulidad de nuestros deseos de verle nuevamente, pensar en los más cercanos, coloquémosla donde sea, la muerte duele . Más cuando la conciencia nos dice que dejamos ir muchas oportunidades de amar.
Es cuando el adiós duele como arrancar pedacitos de piel quemada.
1 comentario:
Duele tener que decir adiós, pero duele más ver que las personas que quiere uno sufren.
Doña Luz seguirá brillando por siempre.
Descanse en paz.
Te amo hermosa
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